Virgi

Hay palabras que resuenan y que arman mi sentido ,que no es sin lo leído y lo vivido.
Hay certeza: que al centro , al ombligo, simplemente no se llega.
Esto podría desalentar al hombre de la ciencia y a los adultos (hoy se me ocurren lo mismo).
No a los niños (de edad y tamaño cualquiera) ya que no se preocupan por la meta sino por el camino.
Cuando vuelvo a leer lo que escribo me suena a poesía, y creo que algo de eso se teje sin querer en este sinsentido